Ir de vacaciones en familia es maravilloso y yo no lo cambio por nada. Las actividades, las experiencias, las risas de los más pequeños de la casa, su carita al ver cosas nuevas… es todo fantástico. Sin embargo, de vez en cuando, nunca viene mal dejar a un lado las responsabilidades y descansar de verdad, saber que los niños están atendidos con la abuela y olvidarte un poco del “mamá” o “papá” por unos días.
Unas vacaciones en pareja, sin niños, puede ser lo que el matrimonio necesita para superar algún pequeño bache, e incluso aunque no lo haya, a veces es necesario tomarse ese descanso sin niños. Ahora bien, cuando hablo de descansar “sin niños” hablo de hacerlo sin los tuyos y sin los del resto de turistas porque al final, aunque no tengas a los tuyos pidiéndote un helado o gritando sin parar, si tienes a otros niños saltando en la piscina a medio metro de ti mientras se lanzan agua y corretean a tu alrededor, el descanso no surtirá efecto.
Ojea opiniones y noticias en red
Ten en cuenta que, a no ser que haya un viaje cultural especial que siempre hayas querido hacer con tu pareja en solitario, lo normal es que en este tipo de viaje de “descanso sin niños” lo que importe no es el dónde, sino el cómo y el con quien. Es decir, queremos relajación, servicios de calidad, habitaciones espaciosas y un poco de lujo a tu alcance, pero todo eso solo se consigue encontrando un buen hotel en el que las familias con niños gritones no tengan cabida. Ahora bien ¿cómo encontrarlo? Yo os recomiendo la búsqueda online.
Encontrar opiniones de otros viajeros es, hoy en día, bastante sencillo con plataformas como Trpadvisor o Booking, pero si a eso le sumas alguna que otra noticia relacionada con el sector tendrás el éxito asegurado. Si buscamos hoteles con premios para hacer una primera selección en la que localizar hoteles con buenas puntuaciones nos aparecen, casi siempre, los premios “Traveller´s choice”, otorgados por Tripadvisor según las opiniones de los usuarios.
Personalmente me parecen los mejores premios en los que fijarnos puesto que, si el premio lo da una asociación, organización o empresa, el resultado de los mismos puede dependes (y mucho) del dinero que la cadena de hoteles haya pagado previamente. Cuando el premio lo dan los usuarios, entonces solo cuenta la opinión de los mismos y sus propias experiencias.
Además, lo bueno de estos premios, es que se dividen en categorías de hoteles por lo que, si buscas algo sin niños correteando por todo el recibidor, puedes saltarte la categoría “familiar” e ir directamente a lo que te interesa. Este año, la cadena de hoteles que ha dado el campanazo en estos premios ha sido Mercer Hoteles, que se ha alzado con ocho Traveller´s Choice, nada más y nada menos. Se trata de un grupo hotelero de lujo que cuenta con hoteles en Barcelona, Sevilla, Donostia, Córdoba, Cerdanya (Pirineo Ctalán), etc. La singularidad de esta cadena hotelera es que los edificios en los que se enclavan sus hoteles no son de reciente construcción, sino que hablamos de edificios históricos que guardan maravillas arquitectónicas y que han sido rehabilitados y reformados para formar parte de la cadena.
Por ejemplo, el Mercer Sevilla está ubicado en la Casa Palacio Castelar, un palacete portugués del siglo XIX en el histórico barrio de El Arenal, en Sevilla. Solo tiene 12 habitaciones, y aunque al estar en pleno centro debe prescindir de grandes jardines, en su azotea han instalado una piscina con solarium y pool bar, toda una experiencia para los sentidos de los huéspedes.
Este año, además, la cadena incorpora dos nuevos hoteles. El Eme Catedral, también en Sevilla, y el Torre del Remei, que es el hotel que ha llamado mi atención. Se encuentra en el Pirineo Catalán y es un palacete de principios del siglo XX ubicado en unos jardines preciosos en medio de la naturaleza, junto al Parque Natural del Cadí. Sinceramente, me parece un lugar de ensueño que quiero disfrutar en mi próximo viaje de descanso “sin niños”. Y a esto es exactamente a lo que me refería: ¿había pensado yo en ir a Cerdanya? Obviamente no, sobre todo porque ni siquiera sabía de su existencia, pero ese hotel, con ese paraje, con esos servicios y con la atención que caracteriza a la cadena Mercer me ha ganado, y eso es lo que quiero: tranquilidad, naturaleza, relajación y que me lo den todo hecho, básicamente.
Por eso, y porque yo también lo necesito, lo más probable es que el año que viene mis hijos se vayan de campamento un par de semanas en verano, o se queden con la abuela, ¿quién sabe? Lo importante es que nosotros podamos ir al Torre del Remei a descansar ¿o no?