A veces no los valoramos lo suficiente, pero la verdad es que los eventos en familia constituyen varios de los grandes momentos de nuestra vida. A veces nos da pereza tener que afrontarlos, una pereza bastante injustificada, pero no cabe duda de que sin estos eventos la vida sería bastante diferente, sobre todo para mal. Hay que tener en cuenta que hay familiares que, por desgracia, solo se ven en uno de estos eventos y, si estos no existieran, habría personas dentro de una misma familia que prácticamente pasarían a ser unas completas desconocidas.
Ojalá fuera diferente, pero la realidad es la que os hemos transmitido. Los eventos familiares, teniendo en cuenta que tienen la capacidad única de reunir a los integrantes de una familia, deberían ser sagrados y los deberíamos repetir más a menudo, aunque no tuviésemos nada que celebrar. Otorgaría felicidad a las personas de las diferentes generaciones y haría posible que psicológicamente nos encontráramos mejor. Y está claro que esos beneficios son lo suficientemente importantes como para no ser tenidos en cuenta como realmente se merece. Si la familia es lo primero, bien haríamos en tener en consideración lo que os estamos transmitiendo en estas líneas.
En una página web llamada Plaza-Family se enumeran varios de los beneficios que están asociados a las actividades que realizamos en familia. Pasamos a desgranarlos:
- Contribuyen a que se refuerce el vínculo familiar, algo que nunca se debe perder y que no siempre estará garantizado si no lo cuidamos con mimo y tacto.
- Contribuye a que los más pequeños mejoren su comportamiento, algo que les sirve para desarrollarse desde el punto de vista personal.
- Estas actividades generan una mayor felicidad, algo que ha escaseado en los últimos años y que debemos recuperar a toda costa.
- La felicidad en familia hará que las personas que las componen tengan mayores posibilidades de éxito en diferentes campos de la vida.
- Los niños y niñas, a causa de pasar tiempo con sus familiares, desarrollarán una habilidad de crianza.
- Podemos obtener mayores dosis de autoconfianza como consecuencia de fortalecer nuestros vínculos familiares a través de los eventos de los que os hemos hablado.
- Tendremos que soportar menores dosis de estrés.
- Se generarán mecanismos de resolución de conflictos entre los diferentes miembros de las familias.
- El rendimiento académico de los más pequeños y pequeñas se verá mejorado.
- Finalmente, se fomentará el juego y los valores positivos que van implícitos a él.
La mayoría de los eventos familiares que se celebran en España son cumpleaños. Es positivo que así sea, puesto que garantiza que una familia se reúna tantas veces como miembros tiene. Además, después de una pandemia que ha limitado de un modo brutal este tipo de eventos, está claro que las familias españolas tienen muchas ganas de volver a vivirlos. Eso es lo que, en opinión de los profesionales de Velas Mas Roses, ha garantizado un aumento de la demanda de velas para cumpleaños. Sin duda, todo lo que sea sinónimo de celebración es una buena noticia y la recuperación de eventos familiares como de los que estamos hablando no podía ser menos.
¡Los cumpleaños no son solo cosa de peques!
Hay quien piensa que celebrar los cumpleaños es algo que solo debería ser festejado por los niños y niñas pequeñas y la verdad es que estamos total y absolutamente en desacuerdo con esa afirmación. Los cumpleaños son para todos y todas, y más si sirven para las cuestiones que os hemos ido comentando más arriba. Los niños lo celebrarán de una manera distinta, jugando al escondite o al pilla pilla, mientras que los mayores tendrán temas de conversación que poco o nada tendrán que ver con eso. Pero no nos equivoquemos: que sean maneras diferentes de actuar en un cumpleaños no quiere decir que solo los peques tengan que celebrarlo.
Estamos seguros de que la celebración de un cumpleaños por parte de todos los miembros de una familia es lo habitual en las familias españolas y que son muy pocas esas familias en las que se suele considerar que los cumpleaños son solamente una cosa de niños. Habría que comprar el humor y la alegría en una familia de un grupo y en otra que pertenezca al otro y ver quién es más feliz. Nosotros tenemos claro quiénes tendrían más opciones de mantener una sonrisa en su rostro.
Estamos seguros de que vamos a seguir celebrando eventos al margen de los cumpleaños. Y es que tenemos tantas cosas que celebrar como queramos. Cualquier excusa es buena: comuniones, bautizos, bodas, graduaciones, aprobación de unas oposiciones… En resumidas cuentas, quien no celebra algo en familia es casi porque no quiere. Así que, si creéis que ese aspecto de la vida familiar debe ser mejorado en vuestra vida, ya sabéis los beneficios que os puede traer. ¡Que tengáis mucha suerte!